CÓMO SE ESTA ESCRIBIENDO ESTA HISTORIA
Balthasar Klossowski de Rola, Patience
Partiendo de que somos muchos a los que nos hubiera gustado escribir una historia y nunca hemos podido, lo primero es aprender a disfrutar de la poesía, de la narrativa, el ensayo, de la pintura y de la música, y luego, hay quien se compromete consigo mismo a escribir a golpe de las pequeñas revoluciones que van provocando en nosotros el viaje por las lecturas de los demás. La forma en que nosotros entramos en los libros y después nos desplazamos hasta la escritura y hasta la vida, forman una interacción intransferible, en la que hace falta un esfuerzo en cada momento por llegar hasta uno mismo, para posicionarse en el lugar único y diferente que cada momento nuestro exige.Es relativamente sencillo contar una historia, si tenemos en cuenta que en toda obra de arte lo que se consigue es objetivar lo subjetivo. Pues un buen libro debería hacer particular lo general, y puesto que es tan difícil, en este caso por intereses, la objetividad, queda por ver, el lugar desde el que se cuentan los hechos.
Lo más difícil que he visto hacer hasta ahora en mi vida, es una persona con deseos de escribir y de ser el mejor escritor, el hombre más sabio, el ser más perfecto, es renunciar a sí mismo, renunciar a la escritura y deformar ese deseo de escribir hasta tal punto, que el personaje que él hubiera querido desarrollar en su novela, pasarlo a la vida real. Para ello ha tomado a otro escritor como reflejo, pero para poder consigo mismo y con alguna cosa más de él con la que nunca ha podido, ha tenido que ser mujer.
Después se han tomado sus escritos, palabras, hechos en público y testimonios parcialmente comparables con la vida real, y sobre una serie de puntos estratégicamente colocados se ha tejido una historia fruto de su imaginación, que vuelva al relato más o menos verosímil y una ardua y minuciosa tarea de difusión, porque claro si el actor no tiene público, la escena es nula.
Unos se han quedado, en la historia que les interesa creerse, sin hacerse muchas más preguntas que las de satisfacer sus propios intereses, otros en cambio estamos viendo como al relato lo han ido estirando hasta donde solo una mirada muy atenta y ecuánime es capaz de detectar la artificialidad, donde se ha eliminado lo contradictorio, hasta donde se ha creado una escritora magnifica pero dentro de una realidad nueva y chocante.
Los que detectaron la broma, sus paisanos y demás aves rapiñaras, en lugar de advertirle sobre lo peligroso que es jugar con la vida de los demás, le aplaudieron la creación de esta atmósfera, mientras él se jactaba de que era solo un juego irónico e inquietante sobre la forma en que somos manejados por los demás, sobre la forma en que somos persuadidos por lo que nos cuentan, sobre todo si nuestros intereses están en juego, y de como se hace una memoria histórica sobre un grupo de sujetos, cuya fragilidad y vulnerabilidad permiten que los moldeen los disparates.
Posteriormente, creado el grupo, es indispensable dejar que los hechos nunca concluyan, procurar que estén siempre en proceso de interpretación y acto seguido, dejar actuar al grupo ya como producto de dogmatizarían espontánea.
Este ente, ya ha creado sus modelos erróneos de imitación, que repiten sin vacilación su entorno, desviando hacia causas comunes y vulgares las actuaciones y las causas del entramado del supuesto juego irónico, que efusivamente aplaude y alienta cuando los repiten los personajes de su grupo, mientras él, sibilino y taimado, se ha quedado con Su Pensamiento, o sea, con la Escritura, Con la Escritora. Mientras se inventa disparate tras disparate a cada rato, con la condición de que todos queden lejos, de lo que de esa mujer y de esa historia es lo importante.
Manuela Cámara 27 marzo 2009. Continuará.
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