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DESPUÉS DE DOS MESES
DE NO IR A ESE CHAT
Y DE TENER CERRADO
ESTE BLOG,
NO ESTÁ TODO IGUAL,
SINO PEOR
Es imposible frente a un paranoico siquiera hablar. Me veo obligada a hacerlo porque se está metiendo en mi trabajo y en mi vida ¡y de qué manera!, esa misma manera da la medida de lo loco que está. Yo no estoy peleando, no me puedo permitir ese lujo, mis sentimientos, aún no tuvieron momento para poder hablar de ellos, me estoy limitando a defenderme y cuanto más lo hago, más se ceba convencido de esa misma paranoia. El enganche es asfixiante, tira por tierra todo lo que representa la escritura y es escandaloso que se refugie en ella para justificar lo que hace. He vuelto a abrir la Historia de un Secuestro, la voz de trasto está tan llena de odio, de mentiras, y de su propia convicción y todo a la vez, al mismo tiempo sigue señalando, sigue afirmando al mismo tiempo que es un hijo de puta y que está convencido de que tiene razón; yo afirmo que tal locura es ya cuestión de la cantidad de años que lleva años mintiéndose y ahora ya, la nueva realidad, Internet, es el soporte de tener esas contradicciones tal como el ejemplo de Freud del Caldero * que yo veo repetido en la cantidad de personajes que tiene y con el relajamiento de conciencia y de verdadero y no con los que cree ser múltiple o no el responsable de sus propios actos a la vez y según le convenga, y con el terrible agravante de que es violento, muy violento y ¡seis años! ¿Qué clase de delirio se puede sostener durante tanto tiempo? Eso sí, según él soy “una letrina” entre otras muchas animaladas, y me revuelvo a preguntar qué hacía esta mañana a las siete llamándome por teléfono, eso sí, con nº oculto mientras yo estaba en el suelo de mi casa haciendo ejercicios de relajación ¿qué es lo que le resulta “una letrina”? ¿Y qué haces metido en el ordenador de “una letrina” señalando a las comas, a los acentos, a las frases, a todo? La letrina eres tú que te permites cualquier cosa y encima proclamas un discurso propio de un delirio omitiendo lo que haces aquí, donde presumes de que “nadie te ve” y donde encuentras coartada para seguir haciéndolo en el hecho de que no te conviene diferenciar el chat, tu ordenador o este, ¿quién sería la letrina si te lo hicieran a ti? Esa es la clase de preguntas que deberías hacerte en lugar de seguir tu ira y taponarte los ojos a lo que ves durante ya seis años. Porque, repito: no se puede ser agresor y agredido en el mismo momento y mucho menos ante actos que sólo te los permites bajo el eslogan de que “NADIE TE VE”. ACLARATE. QUE LLEVAS MUCHO TIEMPOR CACAREANDO UNA AMBIVALENCIA BAJO LA CUAL YO SIGO DE BAJA, ¿CUÁNDO, DÓNDE, TE HE AGREIDO YO? ¿O CREES QUE BASTA CON TENER UN DISCURSO CÍNICO Y ENCABRITADO PARA QUE SEA YA VERDAD? El día que trasto decía eso, no podía siquiera usar el mic., me pisabas, a base de mentiras conseguías que toda la gente se pusiera de tu parte y en el mismo momento seguías diciendo que yo te había agredido, pero tú sigues aquí y te contentas con encoger los hombros y cambiar la señal de “eres una letrina” a “es que soy un hijo de puta”. Esquizofrenia, sí, pero de conveniencia.
A la gente del chat, la has manipulado y ya no creo ni que les importe quien es quien ni qué hayan hecho, pero me faltaba decir aquí que también eres soy_aguilax: muy curioso que fuera yo la única persona que no te quiso linchar el día que resucitaste al personaje de avebella. Debe ser un estilo muy depurado que, de esos actos, hayas pasado a atacar a la persona de la cual decías entonces todo lo contrario, (señal) … sí, sigue señalando que hoy vuelves a ser protagonista y a mí no me alcanza con palabras a decir la infamia que todo esto es, pero te recuerdo que fui la única que no apoyó que te lincharan, así que, tú verás con qué te vas a encontrar cuando te arranquen las caretas.
* La leyenda del caldero: un sujeto le reclama a otro un caldero y el primero le contesta 1) Ya te lo devolví 2) Nunca me lo prestaste 3) Ese caldero no existe.
8 de agosto de 2010
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