VACÍO LEGAL

Es imposible, mañana intentaré decirlo de otra forma, pero hoy solo digo que no me perdonan que escriba. No son desconocidos, no son lejanos como pretenden, son quienes más cerca estuvieron de mí, con nombres, apellidos, caras, historias.
No pasa un solo día, una hora siquiera sin que aparezca el trato vejatorio en relación al sexo, la edad, el estado mental, todo lo que ahí afuera se proclama como despojo. No son algunos, no son cuántos, no son los pocos, son los que se implicaron en algo personal, tiran el hilo y el resto, funciona solo. El que va de escritor, (él, tú, fulano y en singular) no es que cuente esta historia, es que la ha creado para tener algo que contar.
Se te acercan para “follar” pero ni siquiera te dan su nombre. Los peores, los mil veces peores, son quienes usan los argumentos “cultura” para escudarse en ellos.
Lo conté y me dijeron que no entrara ahí, pero eso no era ni fue ni es real: SE SALIERON DE AHÍ Y ENTRARON EN MI CASA y fuera de ella.
Pero es sábado y puedo elegir entre quedare calladita en un rincón o irme a dormir.
Punto.
P.D. Hubo una breve tregua hasta que alguien leyó dos poemas míos y … se acabó la tregua.
17 de mayo de 2009
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